Los búhos son aves de inmensa belleza, pero sus atributos a menudo pasan desapercibidos por tener hábitos mayormente nocturnos. Las hembras y los machos de esta familia de aves se juntan cada año con el objetivo de tener descendencia, pero luego de que los polluelos se independizan siguen caminos separados. Los búhos son muy buenos padres y se encargan de que sus crías reciban un buen cuidado parental, desde la incubación hasta que son capaces de valerse por sí mismos. En este artículo te contamos mucho más sobre la gestación del búho y sus peculiaridades.
Madurez sexual del búho
Es importante destacar la diferencia entre búhos y lechuzas, ya que usualmente se suelen confundir estos dos tipos de aves rapaces nocturnas. Los búhos a diferencia de las lechuzas poseen plumas alzadas en la parte superior de la cabeza, que simulan un par de orejas (aunque los verdaderos pabellones auditivos se encuentran al costado de los ojos).
El desarrollo sexual del búho es completado entre el primer y el tercer año de vida del ejemplar. Algunas especies pequeñas de búhos se pueden aparear cuando cumplen apenas 1 año de edad, aunque las de mayor envergadura no son totalmente maduras hasta los 2 años como mínimo. A partir de este momento son fértiles y tienen las condiciones físicas necesarias para comenzar a aparearse entre ellos, aunque si no tienen las condiciones básicas de supervivencia garantizadas pueden postergarlo un poco más.
Apareamiento del búho
La época reproductiva de los búhos varía según la latitud geográfica y las regiones de los hábitats de las diferentes especies. Los búhos de zonas frías entran en el celo con la llegada de la temporada invernal, fecha que también coincide con la dispersión de las crías jóvenes. Los de latitudes más cálidas encelan un poco antes, generalmente con la llegada de la primavera cuando el clima es más favorable.
Para el cortejo los machos se valen de llamadas y vocalizaciones, que les sirven para atraer a parejas potenciales en territorios colindantes. Por lo general los machos permanecen en su territorio y las hembras se desplazan para acudir al llamado. Una vez que se han emparejado se pueden escuchar a las hembras y los machos alulando juntos, como si se tratase de un dueto. Esta es la característica más significativa del ritual de apareamiento de los búhos, aunque además de las llamadas los machos pueden usar otras estrategias más persuasivas cuando quieren que una hembra de su consentimiento. En estos casos algunos ejemplares pueden realizar un vuelo de exhibición para impresionar a la hembra, o también ofrecerles alguna presa como obsequio nupcial.
La mayoría de las especies de búhos son monógamas, lo que significa que se forman parejas exclusivas que se pueden consolidar durante todo la vida reproductiva de los ejemplares. De esta manera cada temporada se juntan la hembra y el macho con el propósito de engendrar nueva descendencia, luego se separan hasta el año próximo cuando comienza la época de cría.
Generalmente una pareja siempre elige el mismo sitio de anidación y regresa cada año al lugar para el nacimiento de las crías. Los emplazamientos donde colocan los nidos los búhos pueden ser diversos. Pueden elegir algún peñasco o rocosidad en el suelo, la oquedad de un árbol seco, madrigueras de mamíferos, matorrales o incluso casas abandonadas. También pueden mostrar un comportamiento oportunista y optar por nidificar en un nido abandonado de otra especie de ave, siempre y cuando califique como un buen refugio. En general son muy buenos cuando se trata de encontrar resguardo para ellos o sus crías y se han reportado casos de búhos que han atacado a los ocupantes de un nido para hacerse con él.
Tiempo de incubación del búho
El tiempo de incubación del búho es de 30 a 36 días aproximadamente. Al cabo de este corto período de tiempo, eclosionan los polluelos.
Incubación del búho
La hembra búho no se separa ni un instante del nido durante el tiempo de incubación. Desde que realiza la puesta permanece calentando los huevos hasta que estos eclosionan. Como resultado del esfuerzo que debe realizar durante este período puede perder un poco de peso corporal. El macho por su parte se encarga de alimentar a su compañera y brindarle toda la protección que necesita para este momento crucial en su ciclo vital.
Nacimiento y cría del búho
Los meses de febrero y marzo, son los elegidos por los búhos de latitudes gélidas para tener a sus crías. Todas las especies tienen una única puesta al año, de la que pueden nacer hasta 14 polluelos. Al cabo de aproximadamente un mes de incubación nacen los pequeños, con un aspecto que deja bastante que desear. El plumón de los pichones es corto y de color parduzco, a diferencia de sus padres lo tienen muy tupido y les cubre hasta las patas.
El padre sigue trayendo alimentos al nido y la madre los regurgita para alimentar a los polluelos hasta que cumplen 3 semanas de vida. Cuando se trata de una camada numerosa (más de 6 crías) los padres priorizan a los más fuertes, que son los que tienen mayores posibilidades de supervivencia.
Pasadas 3 semanas los polluelos son capaces de alimentarse por su cuenta y cuando cumplen 6 semanas comienzan a salir fuera del nido de exploración. Las crías de búho crecen a buen ritmo, a las pocas semanas adquieren un aspecto similar al de sus padres y con la sustitución del plumón por las plumas, adquieren la capacidad de volar. A las 8 o 9 semanas empiezan con cortos vuelos, que no superan unos escasos metros alrededor del nido. Hasta que no cumplen 14 semanas no son capaces de abandonar el nido por completo y pueden permanecer junto a los padres hasta las 20 semanas, en la mayoría de los casos.
Cantidad de crías del búho
La hembra del búho puede poner de 1 a 14 huevos, dependiendo de la especie, pero lo usual es que solo incube de 3 a 4 en cada temporada reproductiva.